EL SAD EN ESPAÑA FRENTE EL DE ALEMANIA: LA BUSQUEDA DE UN MODELO QUE FACILITE LA PERMANECIA EN EL HOGAR HABITUAL
Es bien conocido, como las políticas sociales de los países más desarrollados de Europa, entre los que vamos a poner nuestro foco en Alemania, han venido conjugando las facilidades para hacer posible la preferencia de los mayores y personas dependientes en permanecer en sus domicilios el mayor tiempo posible de sus vidas. Ante la demanda por el fenómeno del envejecimiento de la población, se incorporaron en
Alemania un compendio de servicios que mejoraba la simple oferta de un cuidador: la creación de servicios de comidas y lavandería a domicilio, podología, acompañamiento, pequeñas reparaciones, etc.
Asimismo, se posibilitó el acceso a prestaciones para adaptar las viviendas suprimiendo barreras arquitectónicas, y adaptándolas a las nuevas necesidades de las personas, según el incremento de su dependencia. El resultado mejoró las expectativas de residencia en el domicilio familiar, logrando cubrir las necesidades de ayudas y mejorando los incrementos de autonomía para las personas.
Además, en países como en Alemania se mejoró en el ámbito laboral las licencias y permisos de los trabajadores, logrando que la mejora de las excedencias y permisos para cuidar a familiares en situación de dependencia y la utilización de una metodología de gestión, haya ayudado a la mejora de la calidad de vida de muchos demandantes de dicha ayuda. Todo, gracias a los últimos cambios producidos en las leyes de Alemania, en busca de la mejora del servicio de Ayuda a Domicilio, y que fueron introducidos mediante una
reforma de la Ley que se llevó a cabo en 2008 en plena crisis económica.
En España de la ayuda a domicilio tuvo sus comienzos en la década de los 70, cuando, por Orden del Ministerio de Trabajo de 19 de marzo de 1970, se establecía el Servicio Social de Asistencia.
Esta Ayuda a domicilio en España, resulta ser una de las más relevantes prestaciones del Sistema de Servicios Sociales que, a lo largo de estos últimos años, ha experimentado una importante reducción de los recursos humanos y financieros disponibles, perjudicando los niveles de cobertura de esta y las modalidades de prestación del servicio ofertadas a la población. Esto es debido a que la competencia de este servicio redunda en parte en las Administraciones Autonómica y Local, que han priorizado los recortes ante las graves crisis económicas que hemos vivido en 2008 y ahora la presente del COVID-19.
A partir de aquí surgen nuevas oportunidades para empresas como Mayor- Domus, que tratan de paliar las deficiencias del sistema. Nuestro objetivo es poner al alcance una verdadera ayuda a domicilio, concebida como un servicio integral, polivalente y comunitario, orientado a las personas y/o familias que presentan problemas para la realización de las actividades de la vida diaria, proporcionándoles atención directa en el propio hogar mediante intervenciones específicas que favorezcan su permanencia e integración en su entorno habitual, y compensen sus limitaciones o restricción de independencia funcional.
Nuestra ayuda cumple todas las funciones asistenciales, al apoyarles en la realización de aquellas actividades de la vida diaria que no puedan ejercitar por sí solas, realizando tareas de atención personal y/o domésticas.
Hasta aquí es correcto el servicio tradicional, pero buscamos mejorar lo habitual con acciones de tipo preventivo, al colaborar en el mantenimiento de la persona usuaria en su entorno habitual. Buscamos principalmente, evitar o retrasar el ingreso en instituciones o centros residenciales, y prevenir el riesgo de aislamiento. También al evitar el traslado a estos centros, eliminar cierto abandono e incluso falta de acompañamiento de las familias por las dificultades de acceso a estas instituciones.
Por otro lado, somos conscientes de la gran necesidad de capacitar y estimular el desarrollo de las capacidades funcionales y realizar un seguimiento de su plan de autonomía personalizado. La atención individual siempre será superior a unas colectiva.
Mayor Domus ofrece, por tanto, una oferta de servicios en domicilio inexistente en España y propia de los países nórdicos, donde ha tenido gran importancia el desarrollo de la Ayuda a Domicilio, concebida como el apoyo a personas mayores y dependientes, para que continúen viviendo en sus hogares de acuerdo con sus deseos.
José A Rebullida.
Director Promoción y Desarrollo Mayor – Domus